No voy a misa. No sé cuándo lo dejé de hacer pero fué ya hace mucho tiempo, pero si recuerdo cosas jocosas en las misas. Cómo esa vez cuando pasaba la mujer de la bolsa de tela con mango por los asientos para que les dejemos unas monedas, mi padre decía: "Echa 1 saca 5". Me reía y mi madre simplemente hacía un gesto gracioso como queriendo decir: "Tu papá se pasa".
Lo qué si tengo grabado en la memoria fué cuando se le hizo una misa en el cementerio "El Ángel" a mi abuela materna fallecida. El obispo, o cura o sacerdote o como le quieran llamar, era pues un señor que podría estar casi seguro que bordeaba ya los 80 años. Recuerdo que entre los concurrentes había una zona ocupada por gente que se expresaba de forma vulgar cómo método de conversación, no recuerdo cuántos años tenía pero era un niño.
La misa comenzó y llegó la parte en que el obispo tenía que leer los nombres de los difuntos a quienes iba dedicada la misa y comenzó leyendo los nombres hasta que al parecer leyó mal el último nombre por lo que uno de los presentes le dijo al obispo en voz alta el nombre correcto de la persona, el obispo le replicó: "Es que no se entiende bien pues!".
Algunas risas comenzaron a emitirse, bueno confieso que también habré sonreído ante ello, más tarde comenzó la parte de las oraciones. No me había percatado pero mi tía si notó que el obispo esaba rezando y en eso se quedó mudo e inmmóvil, al parecer se olvidó lo que seguía mientras los demás si rezaban al unísono. Mi tía medio sonriente le susurró a mi mamá: "Parece que se le terminó la cuerda" y mi madre: "Sí, se le acabó el cassette". Nunca me había contenido tanto la risa y quizás si habré soltado unas carcajadas pero que me las aguantaba para que no me oyeran.
Esa misa parecía un reverendo chiste, tanto así que también uno de los concurrentes también reía a lo que el obispo le decía: "¿Por qué se ríe señor, acaso no tiene fe?". Y yo me seguía conteniendo la risa. Tanto así que mi madre y mi tía decidieron nunca más hacer una misa en aquel lugar y mucho menos con ese obispo pero si que fué divertido.
¿Por qué no voy a misa?
Pues:
1. No lo considero necesario.
2. Me aburre estar parándome y sentándose a cada rato.
3. Porque me da ataques de risa las cuales tengo que contener cuando todos oran. (Más que una razón, es una especie de placer que quizás deriva de lo que conté anteriormente)
4. No me da la gana.
Saludos!
2 comentarios:
Nunca entendí el por qué de pararse y sentarse...
Pues yo menos :S
Ahora que recuerdo, olvidé mencionar que en una ocasión (en otra iglesia) la misa eran tan aburrida que vi como una señora se caía de sueño con la boca abierta, parecía una planta secándose y marchitándose bajo el sol. Cómo me aguanté las ganas de reír jajaa
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