22/03/11
CUANDO ME PROVOCAS
Cuando me provocas,
me enerva y duele, sí.
Cuando me provocas,
y pones tus indirectas,
trato de que no me arda, sí.
Mente cerrada,
Enfermo,
Acomplejado.
Y yo sin saber expresar,
con tristeza,
con pena,
y surge mi desconfianza,
aunque no lo reconozca
y siento rabia,
una presión en el pecho
que luego y siempre
me termino tragando.
Vivo de guardar
y tragar
porque a los oídos convivientes
no les importa un mísero comino.
Y los hipócritas me han sembrado desconfianza
desde muy pequeño
y que lamentablemente aún vivo con eso.
¿Cómo poder hacerte entender eso?
¿Cómo poder hacerte ver que tus provocaciones me hacen daño?
¿Cómo puedo hacerte entender eso?
¿Cómo puedo llegar a ti que estás tan lejano?
Pero cuando te pones
y me provocaras en la intimidad,
cuídate,
que yo tomaré el mando
y reiré un poco
aunque internamente
para que nunca lo sepas.
No con sorna,
sino por recordar viejos tiempos.
Neko.
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